¿Tu postura es el problema?

La mala postura es una de las causas más comunes de dolor de espalda. Pasamos una cantidad significativa de nuestro tiempo sentados, por lo que una mala postura podría ser muy perjudicial para nuestra espalda. Una mala postura provoca presión en los tejidos, las articulaciones y los discos, que debilitará lentamente la salud general de nuestra espalda a la larga. Esta presión no solo ocurre cuando estás sentado, sino que también mientras estás acostado y de pie. Inclinar la espalda puede reducir el flujo sanguíneo, lo que aumenta la presión, y permanecer en este tipo de posición durante mucho tiempo puede provocar una hernia debido a la curvatura no deseada de la columna. La postura es el factor principal en los problemas de dolor de espalda.

¿Es tu sofá el problema?

Todos nos esforzamos por encontrar el sofá perfecto, uno que se adapte a la habitación y a la vez sea cómodo. La recompensa por encontrar este tipo de sofá puede ser comodidad y estilo, pero la parte mala es que puede provocarte dolor. Los sofás blandos suelen animar a los que se sientan en ellos a encorvarse, y dado que la postura es un aspecto muy importante para prevenir el dolor de espalda, encorvarse es lo opuesto a una buena postura. Es posible que los sofás rígidos y verticales no sean tan cómodos, pero al menos ayudan a sostener la espalda en una postura correcta. Generalmente tener comodidad en un sofá significa que es casi imposible mantener la postura adecuada durante mucho tiempo. Aunque el culpable final es nuestra mala postura, el sofá puede ser cómplice de este mal esfuerzo dependiendo de la forma de tu espalda y de la forma en la que te sientes. En Stocksofás disponemos de todo tipo de sofás para que puedas elegir el que más se adapte a tu postura ideal, ¡di adiós al dolor de espalda!

Cómo sentarse correctamente en un sofá

¿Cómo puedes sentarte correctamente en tu sofá para evitar el dolor de espalda? La primera regla es simplemente evitar caerse en el sofá cuando estés sentado. Aunque parece cómodo hacer esto, a largo plazo te estás dañando la espalda. Asegúrate de que tu espalda esté erguida y apoyada en el respaldo, y que tus pies estén en el suelo. Imagínate sentado en una silla rígida, esa es la forma que debes intentar reproducir. Puedes inclinarse un poco hacia atrás para que no te sientas demasiado formal, pero asegúrate de sostener tu cuello si se inclina hacia atrás. Además, si tu sofá es demasiado profundo para sentarte así, usa cojines o almohadas para llenar el espacio que queda entre la espalda y el respaldo. También puedes sentarte en el borde del sofá si lo prefieres, solo recuerda no encorvarte si haces esto. Si ambas posiciones parecen demasiado incómodas, prueba a levantar los pies. Usa una almohada o cojín en el reposabrazos para darte apoyo a la espalda y luego estira las piernas sobre el sofá. La clave es asegurarse siempre de que tu columna no esté redondeada y de que estés totalmente sentado. También es un buen hábito no sentarse durante demasiado tiempo. Incluso si encuentras esa posición perfecta, es beneficioso levantarse al menos una vez a la hora para que tu espalda descanse un poco de la posición.

Ahora que ya conoces la importancia de mantener una buena postura en tu sofá para evitar dolores de espalda

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